¿Cuál es la diferencia—o quizá la similitud—entre hacer el amor y tener sexo? Encontramos la respuesta, y la verdad, nos sorprendió un poco cómo lo perciben los expertos. Sigue leyendo para saber más.
Hacer el amor vs. tener sexo
Como se menciona en Teen Health Source, el sexo o la actividad sexual tiene significados diferentes para cada persona, pero algo es seguro: es una actividad saludable y natural que la mayoría disfruta a su manera. Según Isadora Alman de Psychology Today, las personas pueden participar en este acto por diversas razones: deseo, intimidad, aburrimiento, alivio, ejercer poder, cumplir expectativas, procrear, expresar amor o brindar consuelo, entre otras.
Cuando dos personas hacen el amor, el nivel de vulnerabilidad es notablemente alto. Esto a menudo proviene de compartir emociones y palabras que quizás nunca antes se hayan expresado, como señala Your Tango. Ambas personas tienden a bajar sus defensas, lo que introduce tanto riesgos como recompensas. Al hacer el amor, se experimenta una cercanía única con la pareja, y resulta difícil imaginar los momentos de la vida sin ella.
Aquellos que entienden esta distinción reconocen que hacer el amor requiere que ambas partes sean auténticas—honestas y reales—tal como son en su vida cotidiana. Esto aplica tanto si la pareja elige la sencillez de una posición como la del misionero, como si se aventura en exploraciones más atrevidas.
El amor y la comprensión mutuos permiten a las parejas relajarse completamente y hacer el amor sin sentir presión o limitaciones sobre sus necesidades y deseos sexuales.
Si el amor no forma parte de la ecuación y la interacción se basa únicamente en el placer sexual, separarse suele no ser un problema, y uno puede seguir adelante sin esperar necesariamente compromiso por parte de la otra persona. Sin embargo, esto no siempre es así cuando haces el amor con alguien con quien has formado una conexión más profunda. Hacer el amor implica más riesgos que simplemente experimentar y brindar placer sexual: conlleva compartir sentimientos, emociones y pensamientos profundos durante el acto. Por ello, despedirse no siempre es fácil, y ambas personas pueden sentir un mayor sentido de compromiso mutuo.
Hacer el amor
- Una aventura de por vida
- Una expresión compleja de amor
- Una forma de comunicar amor sin palabras
- Un medio para expresar sentimientos y pensamientos positivos hacia alguien especial
- Implica compartir más que solo tu cuerpo con tu pareja
Tener sexo
- Principalmente una actividad física
- Se enfoca en la estimulación
- Puede disfrutarse incluso sin amor
Para comprender mejor la diferencia entre estos dos actos, como señala Thought Catalog, es útil explicar las “alturas del sexo” frente a las “profundidades de hacer el amor”.
Las primeras se centran en la estimulación del sistema nervioso y su respuesta. Este tipo de sexo suele ser una experiencia puramente física, medible por la intensidad y el poder de la estimulación.
En cambio, las “profundidades de hacer el amor” animan a ambos participantes a usar sus cuerpos, almas y mentes para alcanzar el corazón del otro. Además, hacer el amor proporciona un espacio para que las parejas descubran cuestiones ocultas que pueden surgir durante esta experiencia íntima única. Les permite trascender los límites del cuerpo físico y conectarse a un nivel más profundo. Este acto desplaza el enfoque más allá del cuerpo físico y requiere compromiso para conquistar verdaderamente la mente, el alma y el corazón de la pareja.
Fuente: Difference between Making Love & Having Sex – Embry Women’s Health (embrywomenshealth.com)